La pareja de buceadores formada por Cameron Dietrich y Colin Sutton trataba de recoger atunes en la costa de México a principios de este año cuando Dietrich notó que algo no iba del todo bien. Una tortuga marina había quedado atrapada en una cuerda.
Entonces, Dietrich corrió para salvar a la tortuga, tratando de actuar lo más rápido posible para liberar su aleta izquierda del enredo causado por la cuerda. Sutton la siguió de cerca, con su cámara GoPro encendida y lista para capturar el momento del rescate.
Una vez liberada, la tortuga nadó y nadó, pero, para sorpresa de ambos buceadores, se dio la vuelta y volvió a ir hacia Dietrich. Durante un momento sobrecogedor, se quedó unos centímetros por encima de él en el agua, el tiempo suficiente como para que Dietrich la alcanzara e incluso la abrazara. Fue como si la tortuga quisiera agradecérselo.
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